Escucho la canción que tú cantas y nadie más oye
Y el estertor de tu corazón que a los demás parece vivo
Oigo el grito de socorro de tus labios en sonrisa
Y el llanto seco donde tu alma naufraga
Oigo, en el mismo eco que nos aleja
Maria Assis
Y el estertor de tu corazón que a los demás parece vivo
Oigo el grito de socorro de tus labios en sonrisa
Y el llanto seco donde tu alma naufraga
Oigo, en el mismo eco que nos aleja
Maria Assis
Sem comentários:
Enviar um comentário